Hemos pasado un día genial.
Ya os contaré la jartá de reir escuchando la imaginación de mis alumnos y alumnas al crear hipótesis sobre cómo un maestro sordo, que nos da lenguaje de signos, se despierta por la mañana o abre la puerta cuando tocan al timbre.
¡Qué ideas la de estos chavales!
No hay comentarios:
Publicar un comentario